Al parecer este fin de semana el mundo se volvió completamente loco, el fútbol mostró su faceta más deleznable y lo que iba a ser una jornada de lo más normal pudo terminar en tragedia. Tanto es así que la Sportoto Süperlig turca ha suspendido su normal transcurso hasta nuevo aviso. Ningún jugador del Fenerbache podía imaginarse que un individuo podía aparecer en mitad de la carretera y que este sujeto iba a comenzar a abrir fuego con un arma automática sobre el conductor del autobús, con el objetivo de que el autocar se precipitase al vacío sobre el mar Muerto.
Un asustado Webó comparecía ante los medios para agradecer el gran esfuerzo del conductor que, aún malherido consiguió maniobrar con suficiente eficacia para impedir lo que hubiera sido una tragedia de dimensiones colosales para el mundo del fútbol. " Escuchamos unos ruidos muy fuertes y lo que hicimos fue tirar los móviles y esconder la cabeza debajo de los asientos" afirmaba un preocupado Webó que se mostraba aliviado tras saber que sus vidas estaban a salvo.
El ataque ocurrió en la vuelta del equipo tras su victoria ante el Rizespor por 5-1 cuando iban de camino al aeropuerto para su posterior vuelta a Estambul. El ministro Kilic declaró el ataque como "un ataque cobarde" y por supuesto que se tomarían medidas al respecto. La primera de ellas ha sido la suspensión de cualquier partido de fútbol de la liga turca y de la copa, que afectará al Besiktas, entre otros.
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| Así quedó el autobús del Fenerbache tras el tiroteo |
El atacante que abrió fuego contra el autobús del Fenerbache solo buscaba hacer daño al conductor del mismo pero, por fortuna, supo hacerse con el control y mantener al equipo a salvo. Aunque grave, se cree que la vida del conductor no corre peligro.
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